¿Vale la pena tener un gran ventanal en la casa? Pues depende. Primero cabe tener en cuenta que las ventanas puedan adaptarse a la arquitectura de la casa, no vaya a ser que por más que nos guste llenar de vidrio los ambientes, terminemos convirtiendo la casa en una especie de vivero.
En cuanto a las ventajas, podemos citar la posibilidad de recibir amplias cuotas de luz natural, o de poder disfrutar de las vistas que nos puede otorgar un bonito paisaje, o un edificio en las alturas. En el otro platillo de la balanza, por las contras, cabe recordar que también se pierde una cuota de privacidad, o que si no hay un buen cortinado o un toldo, se puede crear un incómodo efecto invernadero en el hogar durante los meses de calor. Y para evitar problemas de aislamiento, hay que recurrir a estructuras de dos o tres vidrios.
En cuanto a las ventajas, podemos citar la posibilidad de recibir amplias cuotas de luz natural, o de poder disfrutar de las vistas que nos puede otorgar un bonito paisaje, o un edificio en las alturas. En el otro platillo de la balanza, por las contras, cabe recordar que también se pierde una cuota de privacidad, o que si no hay un buen cortinado o un toldo, se puede crear un incómodo efecto invernadero en el hogar durante los meses de calor. Y para evitar problemas de aislamiento, hay que recurrir a estructuras de dos o tres vidrios.
¿Para qué tener grandes ventanas?
La ventana es una oportunidad. Y hay dos factores claves a tener en cuenta: las vistas y la privacidad. Si realmente hay bonitas vistas para contemplar, pues bien vale la pena. Puede ser un campo, una playa, o la ciudad extendiéndose bajo los pies.
Pero seguramente no nos gustaría que desde la calle se perciba la vida interior de nuestra casa, pero sí que tengamos buena luz natural, por lo que los ventanales deberían mirar hacia el patio o el parque interior, como es el caso de esta magnífica residencia de Calvià, en Mallorca. En este caso, la luz proviene del jardín privado, donde en su amplia superficie crece un olivar, y que desde las puertas-ventanas correderas se puede acceder a la piscina.
La pared es una ventana
Una tendencia que va ganando en popularidad es reemplazar una pared por un amplio ventanal, donde la luz puede entrar durante todo el día, y que de noche tiene un toque mágico al poder ver las estrellas bajo la protección del hogar.
Esta idea puede funcionar muy bien en casos como esta vivienda, ubicado en una zona boscosa de los Países Bajos, y diseñada por el estudio Reitsema and Partners: las construcciones tradicionales solían ser de ventanas pequeñas, pero aquí se mantiene el estilo de techo a dos aguas pero con un ventanal en el lugar de la pared. Pero claro, las vistas dan al bosque, y no hay vecinos curiosos ni transeúntes indiscretos que se diviertan a costa de conocer la vida interior del hogar.
Hablemos de costes
Los costes de instalar grandes ventanas se diferencian por los materiales a utilizar, y en algunos casos llegan al 100% de diferencia entre una opción y otra.
La opción más costosa es recurrir a una perfilería de madera, que si bien da un bonito toque rústico, puede incrementar los presupuestos. Más económicas, son las ventanas de perfilería de PVC y aluminio. Las primeras tiene buen aislamiento y cuentan con una alta capacidad de insonorización. Las de aluminio, sobre todo las que tienen rotura de puente térmico, tienen una mejor aislación térmica. Además, cuentan con una amplia gama de acabados y colores.
En los presupuestos, también depende del tipo de cristal a instalar, en donde también cabe tener en cuenta la aislación térmica y sonora que aportan los vidrios. Por otra parte, cuanto más grueso sea el cristal, es más segura la vivienda.
Ventajas
Entre las ventajas de disponer de grandes ventanas podemos destacar la posibilidad de recibir luz natural durante todo el día, lo que permite un considerable ahorro de energía.
La luz de sol que penetra en el interior se esparce por el resto de la casa, y permite que en invierno, si el sol hace gala de presencia, los ambientes iluminados por el astro rey sean más cálidos, y eso también permite ahorrar el consumo de calefacción.
Además, se puede aprovechar la oportunidad de disfrutar de paisajes exteriores, o en todo caso, poder contemplar el jardín o el parque interior, tal como se percibe en esta vivienda con un moderno jardín para disfrutar.
Desventajas
Si hay que recapitular las desventajas de grandes ventanales, es que según su ubicación pueden comprometer la intimidad y privacidad del hogar. Por ello, una solución práctica es recurrir a discretos cortinados, que permitan evitar miradas indiscretas.
Y en verano, más vale que haya algún tipo de protección como toldos o cortinas gruesas, porque si el sol llega en forma directa durante los meses estivales, se corre el riesgo que el hogar se convierta en una especie de invernadero.
Si la ventana no es un excelente aislante térmico y sonoro, conviene recurrir a doble o triple cristalería para poder aislar la vivienda en forma eficaz.
A limpiar se ha dicho
La limpieza, aunque no sea una labor muy cómoda, hay que realizarla periódicamente, para evitar que la suciedad acumulada aparezca como una fea pátina que se refleja bajo la luz del sol.
Lo sugerido es tener un kit de cristalero, que consiste en un cepillo con goma limpiacristales y regleta, que permite una limpieza rápida y efectiva. Primero se pasa una esponja con algo de jabón o detergente, y luego se quita con la regleta. En caso de no disponer de este elemento, se puede reemplazar con una gamuza -pero no con trapos que suelten pelusas- y papel de periódico.
En el caso de algunas ventanas de PVC, se puede desmontar y limpiarla apoyada en el piso, sin tener que estar haciendo malabares o, si la ventana se ubica en las alturas de un edificio, sin poner en riesgo la integridad física.
Fuente: homify.es