El PVC y el fuego


La ventana de PVC es un material autoextinguible que cumple plenamente con todas las garantías de la reglamentación vigente, según la norma Une 53.315. Así, se trata de un material clasificado como M1, que corresponde a un material no inflamable o difícilmente inflamable. El PVC solo sigue ardiendo si se mantiene una llama aplicada en él; al retirarle la llama se extingue
inmediatamente. No puede en ningún caso ser el origen de un incendio ni tampoco constituir un factor agravante del mismo. Son necesarias temperaturas entre 300 y 400 °C para provocar la ignición del PVC, con un índice de oxígeno del 50%. La madera, por citar un ejemplo, presenta una temperatura de ignición menor, arde ya a 260º y sólo necesita un índice de aportación
de oxígeno del 21%. Las ventanas de PVC están formadas por un 43% de petróleo y un 57% de cloro, que se obtiene de la sal común. Este cloro le otorga al material la propiedad de resistir de forma natural a la inflamación y, por tanto, no propaga el fuego en caso de un incendio.
La acción del calor sobre el PVC origina una descomposición de los siguientes compuestos: dióxido de carbono (CO2) de muy baja toxicidad, monóxido de carbono (CO) y gas clorhídrico (HCI), con formación de agua que se elimina por la circulación de aire. Al ser soluble en
agua es rápidamente extinguible. También se produce una rápida condensación en contacto con una zona fría. Al principio de la combustión, el ácido clorhídrico, que es un gas irritante, se detecta rápidamente a través del olfato. Por tanto, constituye una alarma del fuego, lo que
conduce a una detección precoz. Asimismo, los gases de la combustión del PVC no representan una amenaza para la capa de ozono ni contribuyen al calentamiento global más que otros materiales combustibles.
En caso de un incendio la generación de dioxinas no depende de la presencia de PVC. Las cantidades de estos contaminantes son muy inferiores a las teóricas en los ensayos de laboratorio y no representan una amenaza importante para la población ni para el medio ambiente.
Fuente: Asoven